Vomitando letras

¿Cómo conservas un hielo?

La desesperación cunde cuando entre tus manos está algo que, sabes, sólo perecerá más rápido al tocarse.
Esta mano a derretido sal y profanado icebergs, esta mirada ha ido a lo profundo de la congelación y a comenzado a destruir con calidez paraísos árticos.
Estas manos que han fallado a veces hasta sin intentar y que ahora se ven impotentes y mojadas con el cadaver tibio entre las manos.

Este yo testarudo y kamikaze, estos hoyos en los pulmones, y la brujula no tiene flecha, tampoco indicadores.

Es que hay una verdad en este pecho y es ardiente. Quema con una voracidad de flama- inframundo.

Y es que la puta verdad es que estoy sólo y que tu nunca estuviste.

OitseuQ

Encontrar el ritmo para hablarte
las palabras que no tienen pies izquierdos
que se dejan mover por las olas
en una balada de notas perecederas.

Encontrar oxígeno en una extensión de mi rúbrica
es como para el pintor dibujarse en el paraíso
con todo lo que ha anhelado
Él... Lejos, pintando melancólico.

Buscar la forma de entrar
a mis huesos de cal y volverlos de acero
y pararme otra vez
sin lesiones mayores.

Quizá si soy del tipo que encuentra el cielo en la muerte
aunque al cerrar los ojos por última vez sólo duerma
Lejos de la traición de este cuerpo bastardo
la paz de los gusanos perpetuando el 'No regresas'.

Los días se han puesto azules
y la inercia se ha subido al trono de mi voluntad
la fricción no me deja detener el curso
voy corriendo hacia donde una fuerza me encarcela.

Mis ojos cubiertos de vidrio,
mi voluntad en motín
la esperanza no está
si no es que ya se mudó.